Qué problema resuelve
El mayor problema es que los padres no saben dónde está su hijo cuando se encuentra a bordo del bus escolar, y todos los días hay algún apoderado llamando o enviando mensajes de texto al conductor para saber dónde se encuentran o el motivo del retraso en llegar a la casa, todo mientras el conductor se encuentra conduciendo.
Con un máximo que puede llegar a 25 niños en una furgoneta, el conductor está recibiendo múltiples llamadas telefónicas distractivas y mensajes de texto mientras manejando.
Además, hay muchas familias están demasiado ocupadas para llevar a los niños a actividades extra programáticas y no existe un servicio confiable.
Aveeza es una aplicación desarrollada para iOS y Android, co-financiada por CORFO a través de la Fundación Chile, donde los padres pueden conectar con sus conductores de confianza y así monitorear a sus hijos cuando viajan en transporte escolar a la escuela todos los días todo en tiempo real, entre mucho más.
Además los padres pueden reservar viajes adicionales a la carta para sus hijos, como por ejemplo un niño que necesita que lo lleven a práctica de fútbol o a algún taller extra programático, y los pueden usar nuestro red de conductores confiables.
En Chile y otros países latinoamericanos como Perú, Colombia, Argentina y Brasil, el modelo de transporte escolar es similar y único en comparación con Europa o los EE.UU.
El ecosistema es enorme, Chile cuenta con 30.000 conductores autorizados para prestar el servicio de transporte escolar, con cerca de 600.000 familias que utilizan diariamente los servicios de transporte escolar desde y hacia el colegio.
En Latinoamérica hay más de 1 millón de conductores, transportando unos 20 millones de niños anualmente. El costo promedio por mes para el servicio de transporte escolar es de CLP$60.000 por niño, lo que significa que en Chile la industria del transporte escolar mueve más de USD$450 millones por año. En América Latina este mecado mueve más de USD$15 mil millones al año.