Fernando D´Alessio es Director General y Fundador de CENTRUM Católica Graduate Business School. El profesor D’Alessio es Vicealmirante AP. Espada de Honor 1964. Bachiller en Ciencias Marítimas, Escuela Naval del Perú. Doctor of Business Administration, University of Phoenix, Arizona. D. Eng., M.Sc., & B.Sc. Mechanical Engineering, U.S. Naval Postgraduate School, California, EE.UU. M.Sc. in General Management, Salve Regina University, Newport, Rhode Island. Diploma en Estudios Estratégicos, U.S. Naval War College, Newport, Rhode Island. Graduado del Advanced Management Program Harvard Business School, Estudios de especialidad en Babson College, London Business School, y Harvard Business School.
Como país hemos bajado puestos en competitividad. ¿Qué tanto podemos culpar a nuestros gobernantes?
Hay dos medidores de competitividad: el World Economic Forum (WEF) y el International Institute for Management Development (IMD) de Lausana. El primero incluye a todo el mundo, el segundo solo a sesenta países. Lo más interesante para el Perú ocurrió en 2008, cuando llegamos al puesto 35 en competitividad por IMD; es decir, algo más exclusivo. Lo lamentable es que en 2015 hemos bajado al 54 y dentro de poco saldremos de la lista de los sesenta, lo cual es realmente triste. Mientras más bajo estemos en competitividad, vamos a ser más pobres. He pasado por tres mandatarios que recibieron el encargo sobre el tema. Los presidentes regionales tampoco han tenido ninguna reacción.
En un estudio hecho por CENTRUM Católica, solo Lima es competitiva a nivel de regiones…
¡Y solo Lima Metropolitana! Lima Provincia está en el puesto 10 y el Callao en el 49.
¿Por qué Lima y Callao están tan distanciados si son casi una unidad?
Sucede que la descentralización nunca ha caminado acá. Nosotros proponemos diez macrorregiones. No puede haber 26, como era los departamentos. Por ejemplo, Tumbes o Huancavelica no tienen mucho que ofrecer. Lo interesante está en el sur: Tacna, Moquegua y Arequipa que, sin las riquezas del norte, está mejor. Es penoso saber que algunas regiones tienen dinero, pero no hay carpetas, postas médicas ni nada.
¿Se apena de las propuestas de los candidatos presidenciales?
Son propuestas politiqueras. Todos quieren ganar incluyendo en sus listas a cantantes, deportistas o vedettes. Así no se ganan las elecciones. Se deben ganar con propuestas serias.
PPK es el único que habla de competitividad en su plan de Gobierno. ¿Ha leído su texto?
Sí, he leído todos los planes. Desde los monumentales a los de tres páginas. Pero no saben lo que es un plan…
Entonces, ¿solo son monografías?
Lo que hay es un conjunto de buenas ideas. O sea, yo también puedo poner una lista de lavandería. Pero un plan consiste en analizar las capacidades de un país y ver qué puedo hacer con ellas; el potencial nacional. Nuestras aguas profundas nos dan la capacidad para hacer puertos. El aeropuerto de Cusco, que podría mover millones de turistas, solo tiene cuatro mandas y antes ninguna.
El Jorge Chávez ha sido desplazado por El Dorado de Bogotá como mejor de Sudamérica.
Porque el de Bogotá tiene más de cincuenta mangas. La semana pasada estuve allí. Lima ha dejado de ser el centro de gravedad de Sudamérica. No se hace nada al respecto. Hay poco interés por esos temas y solo existe la cultura “chapa tu curul”.
Usted asegura que para una buena competitividad se debe tener buenos puertos y carreteras. ¿Es eso factible por un puerto que está corrompido por el narcotráfico?
No creo que esté así. Lo que pasa es que no saben lo que es un puerto. Estoy seguro que ningún candidato presidencial sabe lo que es. Nosotros deberíamos tener un enlace directo con Brasil, pues si dicha nación se vuelve bioceánica a través de Perú será una potencia del mundo y nos convendría.
Tomando como ejemplo el caso de las marchas contra Keiko Fujimori, ¿hay desidia a la hora de votar?
La gente en este momento está más confundida. No saben por quién votar, no puede ser que de 20 candidatos ninguno le guste. Por ello se necesitan nuevas caras, personas con capacidad de estadistas y con visión de largo plazo, para ser un país de la OCDE, un club de élite. Sin embargo, hay candidatos que nunca han hablado. No tenga nada contra la juventud, pero la experiencia también es importante. No puedes poner a un candidato de 35 años, pero tampoco a uno de 80 hay que tener intermedio.
Lea la entrevista completa en Revista Caras.